23.01.2024
ÉRASE UN ÁRBOL DE LA SELVA LLAMADO JOAQUÍN
En América Latina, el mundo agustiniano, cultural amazónico peruano llora la muerte del P. Joaquín García Sánchez y celebra y exalta al misionero agustino, al estudioso e intelectual del mundo amazónico, al artesano de la cultura amazónica, hecha vida, ciencia, alternativa a la globalización y a esa indiferencia que forma parte de la estrategia del sistema que nos envuelve sutilmente.
La Amazonía tiene otra cara que descubrió y compartió Joaquín García Sánchez en todas sus investigaciones y emprendimientos humanos, culturales, pastorales y evangelizadores.
De ahí el título de este relato: “Érase un árbol de la selva, llamado Joaquín”. Y ese árbol con sus hojas, ramas y raíces se llama Joaquín García Sánchez, OSA. Así lo muestra su vida azacaneada y su ingente labor social, humanizadora, cultural, evangelizadora: el Coro Polifónico de Loreto, el Centro de Estudios Teológicos de la Amazonía Peruana (1972) (CETA), la Biblioteca Amazónica, la revista Shupihui, el proyecto Monumenta Amazónica, el semanario Kanatari, con sus libros “El Río que se aleja” (1987), escrito con Nicole Bernex Weiss, “Una mirada al futuro” (1992), promotor de la Feria Regional del Libro durante 27 años ininterrumpidos.
A la hora de la despedida de este mundo de Joaquín García Sánchez, resulta muy didáctico hacer memoria de su pensamiento y aportación valiosa a la cultura amazónica. Así lo expresa en este escrito con motivo del V Centenario y Amazonía. Historia de un despojo.
La nueva evangelización, la inculturación del Evangelio son así aprehendidas como un nuevo estilo de misión, como fuerza motivadora de la identidad de los pueblos (relación hombre - medio ambiente-memoria) y el descubrimiento contemplativo de la acción de Dios en los procesos de construcción de todas las identidades. Eso y no otra cosa, significa la verdadera comunión: el respeto a la alteridad, la escucha un Dios inagotablemente nuevo, que nos llama desde la raíz de los pueblos con los que queremos compartir nuestra fe y cuya historia de frustraciones y utopías compartimos.
Todos los pueblos de América Latina tienen la posibilidad de hacerse a la aventura para lograr un orden nuevo nacional, regional, mundial, en la medida en que reciban inspiración de aquello que está en la raíz más profunda de su pasado: El pensamiento indígena, único posible portador de la llama sagrada del pasado, apagada hace 500 años por la ambición del oro y el desprecio del otro.
Joaquín García Sánchez había nacido en Sabero (León - España), el 15 de agosto de 1939, llegó a Perú en 1968, después de haber completado su formación académica y sacerdotal. Fue profesor honorario del departamento de Humanidades de la Pontificia Universidad Católica del Perú y Secretario General de la Organización Agustiniana de América Latina (OALA). Celebró sus bodas de oro sacerdotales (2014) en su localidad natal; a donde regresó por última vez (2017) para despedirse de sus familia leonesa.
Falleció en Iquitos (Perú) el pasado 18 de enero. Lloramos tu muerte y celebramos tu resurrección amigo Joaquín García Sánchez, “un árbol de la selva”.