Antecedentes
En 1991, una vez presentada y aceptada su renuncia como obispo en la Diócesis de Palencia, Nicolás Castellanos Franco optó por acercarse a los pobres como misionero enviado por la misma Iglesia palentina. En 1992 llega a Bolivia donde es acogido por monseñor Julio Cardenal Terrazas en la Arquidiócesis de Santa Cruz. Se establece en una humilde casa de la Ciudadela Andrés Ibáñez, más conocida como “Plan 3000”, en la periferia marginal de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra. Allí constituye una fraternidad eclesial, la Fraternidad Hombres Nuevos, integrada por presbíteros, religiosos y laicos, mujeres y hombres, para evangelizar a los pobres desde los pobres.
Además de vitalizar la parroquia Hombres Nuevos, pone en marcha con donativos y ayudas principalmente desde España, el Proyecto Hombres Nuevos, basado en cinco pilares fundamentales: educación, cultura, salud, vivienda y evangelización, con el fin de “ayudar a construir un modelo integrador de trabajo que permita mejorar las condiciones de vida de la población local y que pueda ser replicable en otros lugares de Bolivia”. Junto a la población destinataria de las acciones, se ponen en funcionamiento proyectos asistenciales, educativos, culturales, sociales, de salud, etc..., que buscan ante todo dar soluciones a los graves problemas a los que se enfrentaban los habitantes del Plan 3000 y zonas cercanas.
En 1998, la obra social y bienhechora impulsada por Nicolás Castellanos a través del Proyecto Hombres Nuevos, obtiene dos importantes reconocimientos que proyectan dentro y fuera de Bolivia el abnegado y tenaz trabajo realizado desde 1992. En el mes de junio es galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia “por su contribución al progreso y a la mejora de las condiciones de vida de los pueblos, ayudando de esta forma al mejor entendimiento de los hombres”. Premio que meses más tarde recibirá en Oviedo (España) junto con los también galardonados Muhamad Yunus, Vicente Ferrer y Joaquín Sanz Gadea. En el mes de septiembre el Honorable Concejo Municipal de la ciudad de Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), le otorga la Medalla al Mérito Municipal “como justo reconocimiento a sus destacados aportes a la comunidad en el campo del desarrollo humano”.
En agosto de 1999 tras reunir los apoyos necesarios, crea en la ciudad de Palencia (España), la Fundación Hombres Nuevos para garantizar y dar continuidad a los proyectos en Bolivia.