24.02.2023
CUARESMA: MÁS EVANGELIO Y MENOS RELIGIÓN
Al empezar la Cuaresma, me parece importante y decisivo tener en cuenta esta reflexión teológica, significativa de mi maestro, el teólogo José María Castillo. Siempre nos abre caminos innovadores hacia Dios. Se trata del comentario que hace a Mateo 4, 1–11. Da que pensar y remueve las aguas de esta Iglesia acomodada, poco sensible al mensaje profético de la Iglesia en salida del obispo de Roma, Francisco.
El relato de las tentaciones no es histórico es una lección, presentada en forma de teología narrativa. El que mejor ha explicado este texto es Fiódor Dostoievski, en su novela Los Hermanos Karamázov. Jesús baja a Sevilla a entrevistar al gran Inquisidor. El Evangelio frente a la Iglesia. Y el inquisidor le increpa: "¿Porque has venido a trastornarnos?” La presencia de Jesús incomoda, es preocupante para la Iglesia”. Y el inquisidor explica el porqué: “Porque vas por el mundo con las manos vacías, predicando una libertad que los hombres no pueden comprender, que les atemoriza, porque no hay nada más intolerable que ser libres. Ahí está el secreto del enfrentamiento entre el Evangelio y la Iglesia.
¿Porque? Desde el momento que la Iglesia se organizó como Religión, no como Evangelio, la Iglesia tuvo que pasar por donde pasan las religiones. Exigen una serie de rangos, leyes, normas, ritos, rituales, implica sumisión, dependencia, subordinación a superiores invisibles. Esta es la gran tentación que supero Jesús y a la que sucumbió la Iglesia.
La Iglesia es sabia con sabiduría humana. Por eso se ha mantenido al margen de las exigencias de Jesús, al que reivindica. Ha atenuado transformado, moderado su mensaje. En ciertos puntos esenciales y en cuanto a institución ha cambiado lo que Jesús dijo e hizo. Estamos lejos de aquel hombre bueno que fue asesinado por la religión. Entre la religión y la Iglesia son demasiados los que han preferido el modo reconfortable, cómodo, que impone la Iglesia. Por eso la enseñanza de las tentaciones resulta tan decisiva para la Iglesia y para cristiano.